Cuando entramos a alguna tienda de animales y vemos un guacamayo solo vemos una parte de él. Vemos su pico enorme, sus patas ágiles con las que sujetan los cacahuetes antes de pelarlos, su plumaje vivo y su ¨gracia¨ cuando nos suelta un hola! Como el que no quiere la cosa. Hoy vemos, la otra cara de la moneda.
Porque el tráfico de animales es uno de los negocios más rentables del planeta, solo ganado por las armas y porque tú puedes contribuir a detenerlo para que miles de especies sigan existiendo, este programa te interesa. ¿Te vienes al Amazonas?